You should know...

Mi foto
Llevo 22 otoños sobreviviendo al mundo y viviendo en el medio de la nada, mientras plasmo el mundo en palabras desde mi punto de vista.

sábado, 4 de julio de 2015

Rayados 68.

Apenas él le abría el corazón, a ella se le confundía la razón y caían lágrimas en cascadas, en salvajes cantidades, en dolorosas sustancias. Cada vez que él juraba saber sus sentimientos, se enredaba en un débil hilo y tenía que acostumbrarse de cara al dolor, sintiendo cómo poco a poco las espinas se introducían, se iban amontonando, atormentando, hasta quedar tendido como el acolchado de algodón al que se le han dejado caer unas partituras de amor. Y sin embargo era apenas el principio, porque en un momento dado ella se mordía los labios, consintiendo en que él aproximara suavemente sus extremidades. Apenas se chocaban, algo como un rayo los dividía, los unía y movía, de pronto era el ciclón, la atmósfera de los errores, la destructiva lucha del amor, los estereotipos del mismo en una forzosa relación. ¡Ayuda! ¡Ayuda! Heridos en la esquina del mundo, se sentían fallecer, pequeños y gigantes. Temblaba el cielo, se vencían las puertas, y todo se revolvía en un profundo pozo, en olas de atormentadas aguas, en caricias casi crueles que los guiaban hasta el límite de lo perfecto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario