You should know...

Mi foto
Llevo 22 otoños sobreviviendo al mundo y viviendo en el medio de la nada, mientras plasmo el mundo en palabras desde mi punto de vista.

viernes, 16 de septiembre de 2016

Cruzo los dedos para que se vuelva a dar.

Y se va a dar, no porque cruce los dedos, no porque se lo pida a Dios, no porque se lo pida al 11:11 ni a una estrella fugaz o un trébol de cuatro hojas. Se va a dar porque vernos despertó lo dormido, como si se tratara de un volcán, así son los sentimientos. Pero no dejes de cruzar los dedos, no dejes de soñar, no dejes de pedirle al 11:11 o a la estrella fugaz. Necesitamos toda la suerte del mundo para no volver a alejarnos. Ya no quiero perderte.

lunes, 12 de septiembre de 2016

Yo nunca he...

dejado de luchar, con y contra la corriente. Yo nunca he permitido que mis sueños se desvanezcan. Yo nunca he abandonado las esperanzas, aunque tenía las razones para hacerlo. Yo nunca he creído que soy mejor que otros pero, sí, tal vez, peor. Yo nunca he dejado de dudar, por todo. Yo nunca he bajado los brazos, nunca me rendí, aunque tuve ganas de hacerlo, millones de veces, sí. Yo nunca he dejado de buscar las respuestas que quiero, que necesito, que se esconden. Yo nunca he optado por abandonar el barco, por más complejo que fuera el camino. Yo nunca he aceptado ayuda, no sólo por mi terquedad, sino porque quiero lograrlo por mis propios medios. Yo nunca he deseado herir, pero me he dado cuenta de que eso pasará igual porque no se puede hacer a todos felices. Yo nunca he dejado de sentir, aunque he deseado, muchas veces, lo contrario. Yo nunca he perdido el miedo, pero supe ocultarlo. Yo nunca he odiado, teniendo razones y queriendo hacerlo, necesitándolo, no he podido. Yo nunca he entendido la mayoría de mis acciones, ni las razones que me llevaron a la realización de las mismas. Yo nunca he descansado lo suficiente, no sólo físicamente, pero mentalmente. Yo nunca he huido, pero lo he necesitado. Yo nunca he dejado de vivir, pero sí me he sentido muerto por dentro. Yo nunca he dejado de amar lo que tengo, lo que quiero, lo que necesito, lo que me rodea. Yo nunca he...

viernes, 9 de septiembre de 2016

Saber sin saber sabiendo.

Ella sabe. Yo sé que ella lo sabe, aunque quiero creer que ella no lo sabe y que yo no sé que lo sabe. Me quiero convencer de que esa información sigue siendo un secreto, de que no sabe de mi delito, de mi error, de mi carga. Pero lo sabe, aunque finja no hacerlo, aunque me haga creer que no lo sabe, aunque lo deje pasar y no permita que eso cambie las cosas. ¿Por qué? ¿Por qué no me dice que lo sabe? ¿Por qué no le importa? ¿Por qué ese amor es más fuerte que el delito? Por esto se puede pensar que es estúpida... o que está totalmente enamorada y dispuesta a seguir intentándolo... pero, sea lo que sea, me agrada que sea así. ¿Por qué? Eso sí que no lo sé. Pero lo demás... lo demás, sí, lo sé.